Mi angel herido, navegas sin rumbo... Tormentas pasadas, locuras sin tiempo, trajeron un llanto, que llueve en tu mar... Y allí a la deriva, sin anclar tu alma, un viento rebelde, se llevó tu paz. Un amor absurdo, pero tan profundo... Un amor extraño que esta en alta mar, donde una sirena, que grita tu nombre te abruma, te absorbe, te aleja... y te vas... Mi ángel herido alma de mi alma, un velero nuevo, te invito a abordar, y desde este puerto, remonta las olas, y corre al encuentro, de quien amas, ya... Si pudiera acaso, o me permitieras, asumir tu pena, darte nuevas fuerzas ayudarte a bogar, te regalaría mis felices días
y te robaria tus días de pesar
Tomaría todas tus tristezas nuevas,
y con mi vida entera ,
colmaría tus bodegas de sueños y paz... .
En la travesía tan sólo recuerda, que quien hoy te habla, fue y es tu papá...